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Texto para el Debate: Jonsismo y Antagonismo

Texto para el Debate: Jonsismo y Antagonismo

MANIFIESTO JONSISTA

Por la reconstrucción del movimiento revolucionario


 

El siglo XX apenas acabado ha sido crucial en el nacimiento, auge y caída de los movimientos revolucionarios del más variado signo.

Todo país, no importa su latitud, composición, historia o condiciones, ha visto surgir en su interior procesos revolucionarios contrapuestos a la depredación capitalista. No ha habido nación, joven o vieja, grande o pequeña en la que no haya latido ese impulso subversivo y catilinario propio de las juventudes heroicas: el impulso revolucionario.

Paralelamente, ningún país ha escapado a la antítesis de ese impulso: la Antirevolución

Las fuerzas antirrevolucionarias bien implantadas políticamente, económicamente privilegiadas, apoyándose en los grupos sociales más mostrencos e insolidarios, así como en la desidia y en el conformismo de las mayorías conservadoras, se han opuesto al Movimiento revolucionario - allí donde este se ha dado - de las más diversas formas.

Así, la Antirevolución, ocasionalmente, no ha dudado en suplantar de forma innoble a las fuerzas revolucionarias, desplazando a las minorías propiamente subversivas de la dirección del Movimiento casi desde el mismo momento de su nacimiento como entidad política autónoma.

Tal es el caso de la Revolución española, uno de cuyos componentes fundamentales fue el Movimiento revolucionario nacional-sindicalista, políticamente encarnado en las JONS.

Convencida de la virtualidad revolucionaria del Jonsismo, la Antirevolución de derechas fue asfixiando económica y socialmente al nuevo movimiento hasta rodearlo de un muro político compacto edificado por la interesada mistificación antimarxista y la perversión doctrinaria conservadora en proceso de reorganización táctica y teórica durante el primer tercio del siglo XX.

Surgió de esta manera la Falange Española, plataforma contrarevolucionaria cuya efectividad quedó de manifiesto al fagocitar al neonato Movimiento jonsista, apoderándose de sus más fecundos lemas y laminando sus más radicales hallazgos hasta conseguir equiparar nacional-sindicalismo y falangismo, lo que – como el tiempo se encargaría de demostrar- es algo ideológica y políticamente insostenible.

La Antirevolución de izquierdas cumplió también su misión en lo que respecta a la destrucción de los auténticos sectores revolucionarios de españoles proletarios, aliándose con la contrarrevolución radical-burguesa encarnada por el insignificante Partido comunista de España, hasta conseguir erradicar a las fracciones social-revolucionarias y a los sindicalistas libertarios del consenso político republicano.

El Jonsismo representa la verdadera Línea fundadora del patriotismo revolucionario español.

Sin embargo, su historia y su pensamiento no pueden quedar estereotipados en lemas y consignas, en escritos políticos o en figuras legendarias, sin ser por ello mismo traicionado como Movimiento revolucionario genuino.

La verdadera traición al Jonsismo la cometen aquellos que considerándose tales, se niegan obcecadamente a asumir los desarrollos históricos posibles del mismo enclaustrándolo en un arco de tiempo limitado y considerándolo como doctrina cerrada, cuando no como simple fenómeno precursor.

Pero un Movimiento que nació como Vanguardia, y reclamando un puesto de vanguardia en la Revolución española, no puede morir en las retaguardias escapistas de aquellos que precisamente han utilizado a varias generaciones de jóvenes revolucionarios españoles como coreografía de su pasacalles triunfal y reaccionario.

Resulta paradójico observar de qué forma grupos y tendencias puramente neofranquistas siguen utilizando términos, símbolos, imágenes, referencias y títulos de supuesta "legitimidad" revolucionaria extrapolados del nacional-sindicalismo histórico para tapar sus vergüenzas ideológicas.

No se conforman con haber puesto la bandera rojinegra y el yugo y las flechas al servicio de un sangriento despotismo clerical/reaccionario. Pretenden desgajar todos y cada uno de los elementos históricos que dieron vida en su momento al Jonsismo revolucionario, poniéndolos al servicio de sus más ridículas ambiciones.

Por ello, cuando hoy hablamos de Jonsismo y de Movimiento jonsista no nos referimos al partido histórico Jons que ni existe ni pretendemos que exista, no hablamos de la "forma" histórica sino de la esencia radical, de la comunidad de ideas y de la sustancial capacidad de transgresión que todo pensamiento revolucionario tiene como característica principal. Atreverse a pensar, atreverse a decir NO y ser capaz de hacerlo y decirlo coherentemente con lo que se es y con lo que se quiere y actuar en consecuencia.

El Jonsismo contenía las primicias de un pensamiento revolucionario que por fuerza de la urgencia histórica en la que nació apenas sí pudo balbucear sus primeros desarrollos, aplicándose más en la crítica implacable de la poquedad nacional de aquel entonces que en el despliegue de sus mitemas fundamentales.

El nacional-sindicalismo, pues, no fue directa emanación de una teoría del mundo, sino una aplicación doctrinaria hija de una coyuntura política que exigía hechos más que palabras, fuerza antes que reflexión.

Aún así, la esencia radical, la transgresión permanente dentro de una visión del mundo, sigue siendo la característica básica del pensamiento de Ramiro Ledesma Ramos y sus Jons hasta el día de hoy.

Ahora bien, tampoco es un secreto para nadie que la comunidad de ideas con las que el Jonsismo se identificaba fueron sucesivamente derrotadas en las dos guerras civiles que más han determinado la realidad española del siglo XX; a saber: la Guerra civil española 1931-1939 y la Guerra civil europea: 1914-1945.

Bien señaló nuestro fundador que "solo se alcanza la categoría de derrotado después de haber luchado, y eso diferencia al derrotado del desertor y del cobarde".

La Guerra civil española nació de la necesidad imperiosa de la Antirevolución de aniquilar a las fuerzas de la Revolución española independientemente del bando u orientación política que éstas tuvieran circunstancialmente adscritas. No por casualidad durante la primavera de 1937, es decir, en plena contienda civil, las disidencias internas de cada bando fueron reducidas ("unificadas") en nombre de una misma concepción burguesa de la "unidad de mando".

La proclamación de la República burguesa en 1931 es la fecha de inicio de dicha estrategia de guerra.

La Antirevolución ha sido y es la AntiEspaña. Hasta el punto de haber conducido al país a su más grave conflagración fratricida y haber utilizado su doloroso recuerdo, y el amenazante recuerdo de la represión subsiguiente, para asentar el actual régimen monárquico-capitalista, poniendo a todo al pueblo al servicio de los intereses monopolistas del imperialismo norteamericano.

Para mayor escarnio, el régimen de los vencedores, constituido desde el principio como régimen Antirevolucionario, utilizó los símbolos, lemas y parte de la doctrina nacional-sindicalista, prestados ilícitamente por los usurpadores falangistas, como medio de legitimación revolucionaria durante la fase bélica convencional de la guerra mundial europea, después de haberlos agitado conveniente para atraerse la ayuda de las fuerzas del Eje en su "cruzada" de liberación (sic) nacional.

Franco - y con él la mayoría de los sectores sobre lao que sustentó – prestaba su rostro a esa AntiEspaña que durante cuatro siglos aplastó los legítimos deseos de emancipación social y nacional de las clases populares españolas, desde las guerras de las Comunidades y las Germanías, hasta las sangrientas trincheras de Brunete o de Belchite.

Independientemente del bando al que pertenecieran, y más allá de cualquier bandería, por encima de las supuestas "dos Españas", la Tercera España, que no es la España-ficción de la supuesta reconciliación y del juancarlismo, sino la Tercera España Revolucionaria, en la que el Movimiento jonsista se ha reconocido siempre, rendimos tributo a los caídos por la Revolución española durante ese infausto período de la historia nacional.

Tributo que hacemos extensivo a todos aquellos verdaderos revolucionarios caídos durante la Guerra de la Sangre contra el Oro, del Trabajo contra la Usura. Caídos en un conflicto de alcance universal donde se jugaba la suerte de Europa, de una Europa europea, reorganizada según la comunidad de ideas de la sangre y el espacio, del derecho natural de los pueblos heroicos, un haz de naciones reconstituidas en una Unión de Repúblicas Socialistas; no una Europa norteamericana, como la que hoy, derrotada y humillada en 1945, se arrastra sumisa ante el dolor de su vencedor, golpeado recientemente en los símbolos de su Arrogancia y de su perfidia.

Y no nos equivoquemos. Los gobiernos y las clases dirigentes de las actuales sociedades europeas son herederos de esa Antirevolución travestida de "fascismo" entonces o de "democristianismo" después, de "socialdemocracias" o de "liberalismo", ad usum delphini siempre, de esa Antirevolución a menudo agazapada en cuarteles y sacristías, en grupos empresariales o dirigencias sindicales, en movimientos populistas e incluso en fracciones ultrarevolucionarias.

Sin lugar a dudas, ha sido la traición integral de los antirrevolucionarios lo que ha permitido a las hordas norteamericanas poner su pie en nuestro continente y convertirnos en ellos mismos, o sea: en lo peor de ellos mismos, en norteamericanos sin derecho de voto, idiotas complacientes de su propia derrota a la que llaman, para más inri, "Liberación".

Que una "liberación" es necesaria, nadie lo duda. Pero de ellos, los yanquis, y de la Antirevolución que incapaz ya de sentirse como propia, realiza tranquilamente la tarea sucia de control interno que el imperialismo deja en sus manos.

España caso avanzado de este fenómeno de decadencia "triunfal" es la prueba evidente de que la Antirevolución no es una palabra sino una fuerza, no un concepto sino una traición; porque colocar a toda una serie de naciones bajo la bota dorado de una potencia extranjera hostil a toda forma de civilización auténtica aprovechando una coyuntura bélica donde se juega el ser o no ser de todo un continente, es delito de lesa traición. Y si existe la traición, también la lista de traidores.

No por casualidad, Santiago Montero Díaz, advertía ya ante una audiencia de viejos nacional-sindicalistas en julio de 1943 tras la caída de Stalingrado que la Antirevolución afilaba las armas de la traición:

"Pero si el Partido –y sigo moviéndome en el terreno instrumental e inofensivo de las hipótesis- abandonase ahora su solidaria adhesión de camarada hacia Alemania e Italia ¿cómo entenderíamos que pueda responsabilizarse de veinte siglos de historia patria, un Partido que no se responsabilizaba ni siquiera de diez años de su propia historia?"

Pero que no eran hipótesis quedó demostrado por el golpe de Estado con el que la infame dinastía Saboya derribó al régimen de Mussolini en Italia o con el intento de golpe frustrado justo un año después contra Hitler por parte de la Antirevolución militar alemana.

La derrota de Europa, el sacrificio inaudito de la nueva aristocracia política que la propia guerra popular anticapitalista estaba configurando, fue el punto de partida del liderazgo norteamericano sobre el mundo, y el comienzo también de un nuevo conflicto de "baja intensidad", la "guerra fría", que posibilitó que los sectores más reaccionarios de la Antirevolución (como el régimen franquista) occidental se asentaran firmemente en el contexto internacional, realizando sin traumas aparentes, la transición hacia sistemas de democracia liberal-capitalista, los mejor adaptados para el mantenimiento discreto de los equilibrios oligárquicos estructurales del sistema.

Tras más de cincuenta años de "felicidad" democrática y privilegio capitalista el Imperialismo y las fuerzas de la Antirevolución por él sostenidas se enfrentan a graves crisis y profundas contradicciones que por su propia naturaleza no podrán ser resueltas por los mecanismos convencionales hasta ahora en uso.

Frente a la brutal ofensiva final de los imperialistas y de sus asociados que ya se presiente, el Movimiento jonsista llama a toda la juventud nacional a cerrar filas alrededor de un programa y de un movimiento revolucionario, organizando la resistencia según el modelo histórico jonsista: promoviendo grupos de base y juntas de acción.

* * *

El Movimiento jonsista, dividido, negado, falsificado y despreciado por setenta años de Antirevolución en España, consciente de la necesidad de reorganizar el Movimiento revolucionario sobre bases sólidas y eficaces, hace un llamamiento para rescatar la Línea fundadora de la Revolución nacional española de las manos de los sectores más retrógrados de la contrarrevolución derechista, proyectándola a la luz de la teoría revolucionaria hacia la realidad del mundo actual, como vanguardia popular, libre de prejuicios y de dogmas estériles.

El movimiento jonsista de hoy, de ayer y de siempre, lucha por la libertad y la dignidad de la comunidad nacional de todo el pueblo que solo pueden ser defendidas coherentemente dentro de un Estado republicano de trabajadores, fuera del cual todo es mentira, podredumbre y miseria.

Por la Patria, el Pan y la Justicia

¡No parar hasta conquistar!

35 comentarios

Anónimo -

Ramiro muere sin apoyar el alzamiento por considerlo contrarevolucionario y por lo tanto creo yo sin estar en la disciplina de falange

Y eso es lo que hay ...

Antichaparrón -

Efectivamente Ramiro daba mucha caña a los socialistas... pero reconozcamos que la razón es que en España se identifica socialismo con PSOE, en los años treinta, y ahora de nuevo. De la misma forma que en los años treinta, decir "radicales" automáticamente hacía referencia al partido de Lerroux, no al significado real de "radical".

strasserista -

De nada NACIONAL-REPUBLICANO;por favor no me llames de usted,llamame "camarada".
" NO PARAR HASTA CONQUISTAR "

Nacional-Republicano -

Gracias, strasserista, se ve que usted ha tenido más tiempo que yo, y encontró la palabras de RLR.
Saludos cordiales

strasserista -

JCAH;seguro qué me echabas de menos..¡;yo sé de lo que hablo y ahí están los textos de "discurso a las juventudes de españa";que cito textualmente:"He aquí esa dos palancas: una la idea nacional, la patria como empresa histórica y como garantia de existencia histórica de todos los españoles; otra, la idea social, la economía socialista, como garantia del pan y del bienestar económoco de todo el pueblo"; en escritos políticos (1935-1936),se puede leer:" un movimiento político de entraña nacional profunda y grandes perspectivas sociales, mejor dicho,socialistas";eso decia Ramiro con relación al nacimiento de las JONS en España.El debatir ideólogicamente me ha ayudado a hacer gimnasia y rleer los libros que tengo sobre el nacional-sindicalismo y Ramiro.Además no te voy a contar mis batallitas pues llevo luchando como "NR"; desde los 16 y ahora tengo 50,amén de haber militado en algunas de las "Falanges".¡NO PARAR HASTA CONQUISTAR!

Nacional-republicano -

La Patria Libre, no es una revista de ideas,... Es una revista para agrupar a los elementos más sanos del N-S separados del grupo de Primo de Rivera, y es una especie de banderín de enganche y de tribuna donde contestar a los insultos de Primo (¿Te acuerdas del artículo publicado en Arriba: "Arte de identificar revolucionarios"). De Nuestra Revolución solo puedo escribir y editar un número, y como vez no usó simbología jonsista o pre-jonsista... No dio tiempo a más. Sobre Calvo Sotelo, seria una cuestión estratégica más que ideológica... supongo, tendría que repasar esos textos.

jcah -

Si es así, ¿por qué no utiliza esa definición en la Patria Libre o en Nuestra Revolución? ¿por qué le reprocha al Marqués de Estella no haber llegado a un acuerdo con Calvo Sotelo?

Nacional-republicano -

La revista JONS, es la más "conservadora" de todas las fundadas por RLR, no es de extrañar que no use la palabra socialista... Si hasta colaboró el Marquez de Estella.

Hablar de socialismo es la evolución lógica de un nacional-sindicalista revolucionario como RLR.

strasserista -

cuando se habla de "justicia social",a qué nos referimos?, no será a socialismo.Sí quieres pudes consultar el libro "las jons revolucionarias", en la pag,91 ,en la cual se puere leer: "La teoría del qrebantamiento de "la tiranía del interés" eje central de la propaganda nacional-socialista, recibió cierta atención en las publicaciones jonsistas.Llama la atención que en el primer número de la revista jons se halle una recomendación para todo jonsista de realizar la lectura del breve opúsculo de Feder programa del nacional-socialismo, aunque no estuviera traducido al castellano", en la pag,189, se puede leer en el encabazamiento: "Siempre afirmamos: nuestro nacionalismo es revolucionario, es decir que llava en sí los gérmenes subversivos para una justa renovación social." (JONS, "trayectoria de las JONS" ,noviembre 1933).Como ves no necesito qué nadie me defienda,podria seguir citanto textos de esté libro mágnifico de Erik Norling. ¡NO PARAR HASTA CONQUISTAR!

Antagonistas -

¡¡...será por camisas!! Y ahora que empiezan las rebajas!!

jcah -

He mirado el prólogo de "Fascismo en España" y, efectivamente, salen las palabras reseñadas por Antagonistas.

¿Quiere eso decir que Ramiro se definiera como socialista o abogara por definirse como tal? No, porque en el resto de su obra, especialmente la dedicada a captar voluntades de la gente, como por ejemplo LCDE o la revista JONS, en ningún momento se define como socialista. Y en cambio desde esas mismas páginas encontramos que sí se ataca virulentamente al socialismo, sin hacer ninguna distinción entre socialismo marxista y socialismo no-marxista. Ramiro es consciente de las connotaciones que tiene en la palabra "socialismo" en España y desde el primer momento desecha su uso. Téngase además en cuenta que las JONS no son sólo Ramiro, son Onésimo y otros muchos a los que a bvuen seguro la definición de "socialista" les sentaría como una patada en la barriga.

Estimar que Ramiro se define como socialista en base a esas palabras es un dislate y agarrarse a un clavo ardiendo. Es lo mismo que si cojo el epílogo de "fascismo en España" y de ahí deduzco que Ramiro reniega del fascismo. O lo mismo que si digo que Vázquez de Mella era socialista porque en algunos de sus escritos dice que al carlismo le cuadraba perfectamente la definición de socialista, pero que por el desgaste del término proponía la palabra "sociedalista". Hay que valorar la obra de las personas en su conjunto.

Strasserista: como ya intuía, has demostrado que no sabías de lo que hablabas. Habías oído campanas en algún sitio y han tenido que ser otros foristas los que vinieran a sacarte las castañas del fuego. Además, si como dices, te sienta mejor la camisa parda, deja de utilizar a ideólogos nacional-sindicalistas para justificar vuestras aventuras en España. Buscaos vuestros propios referentes y dejadnos a los de la camisa azul o negra con los nuestros. A nosotros no se nos ocurre ir diciendo por ahí que Strasser era un nacional-sindicalista o que Hitler era un derechoide.

Nacional-republicano -

Gracias, Antagonista. Efectivamente creo que es ¿Fascismo en España?, curiosamente anoche me repasé el "Discurso..." Seguiré mirando cosas.
Veo que reseñas usando los viejos y queridos libros de Trini LR, te recomiendo las OO.CC. de RLR, editadas por la Fundación RLR en 2004, en 4 volúmenes.
Para Strasserista... NI pardas, ni negras, ni rojas, estamos en el siglo XXI.

strasserista -

JCAH,como pudes comprobar yo no me invento nada;ahí están las respuestas de,Antagonistas y Nacional-Republicano,a los cueles agradezco qué te respondan;al intentar como siempre,"falsificar la ideólogia ns".Sí Ramiro metia caña a los socialistas;era a los "socilistas-marxistas", y a nadie más.Parece qué tienes complejo a la hora de reconocer qué el nacionalsindicalismo,es un forma de "SOCIALISMO", y ese complejo sólo lo puden tener los falangistas;nacional-catolicos.A mí me sienta mejor,"la camisa parda,qué la azul falangista".
¡NO PARAR HASTA CONQUISTAR!

Antagonistas -

Para Jcah:
Quizás se refiera a "Unas líneas previas" prefacio de "¿Fascismo en España?" donde se habla de los esfuerzos hechos por el autor y otros militantes "en España para organizar ....un movimiento político, de entraña nacional profunda y grandes perspectivas SOCIALES, mejor dicho, SOCIALISTAS. Lo que las gentes llaman por ahí el fascismo."
"El autor ha sido....uno de los más fervorosos partidarios de este designo(...)"
R.L.R "Escritos politicos 1935-36: FASCISMO EN ESPAÑA, pg. 31 Madrid, 1988.

jcah -

Pues búscame eso de "... somos sociales, socialistas,...", que me interesa el tema. No recuerdo que Ramiro se definiese nunca como socialista y es más recuerdo que metía bastante caña a los socialistas, sin especificar que hubiera otro socialismo diferente.

Nacional-republicano -

Cuando tenga tiempo, revisaré la edición facsimil de LCDE, para ver lo del "Mi lucha", lo que si puedo afirmar, es que se planeo editar por "Ediciones La Conquista del Estado" dicho libro/biblia de los "hitlerianos".
Y si la memoria no me falla, tengo que mirarlo, es que RLR si deja escrito en varias partes de su obra, algo así como: "... somos sociales, socialistas,..."

Saludos NR

Antagonistas -

Resueltos los malosentendidos suponemos.
Creemos que el Documento de Comunidad del Pueblo que habiamos presentado tenía un buen nivel.
Y tambien ha sido excelente -creemos- el nivel de los comentaristas. Ese es el camino.
Gracias a todos,
L.A-IZQUIERDA NACIONAL

jcah -

strasserista dice que LCDE publicó varios extractos del Mein Kampf. Yo lo he exagerado inconscientemente diciendo lo publicar el Mein Kampf por fragmentos. Está claro que publicar fragmentos de algo no es igual a publicar por fragmentos algo (se entiende la obra entera). Pero no creo que sea una exageración tan grave, aunque pido disculpas, porque una exgeración siempre supone deformar la realidad.

Pero en cualquier caso, no afecta al fondo de mi argumentación. Al menos en la edición que yo tengo de LCDE no aparece ningún fragmento del Mein Kampf. Pudiera ser que me olvidase de algún texto pero en todo caso podría ser un fragmento suelto. Ahora, que se publicaran varios fragmentos del Mein Kampf a través de las sucesión de ediciones de LCDE (como parece dar a entender strasserista), eso lo niego rotundamente.

Cordura -

Amigo JCAH, eres un poco "largo" a la hora de acusar, ¿no? Lo digo porque acusas a Strasserista de mentir, pero además lo haces, conscientemente o no, tergiversando lo que él te decía (¡él no te hablaba de que se "publicase por fragmentos" el Mein Kampf en "la Conquista del Estado", sino que Ramiro publicó algún extracto ahí, lo cual es obviamente cierto!).

Harías bien pidiendo rectificando por tu pifia, pero tú verás.

Por lo demás, no te falta razón en tus apreciaciones sobre Hitler.

Antagonistas, con todo respeto: si el blog no dispone de un editor que permita usar negritas o cursivas (o ambas a la vez) para hacer destacados, digo yo que no viene mal usar las mayúsculas de cuando en cuando. Dicho sea de paso, Strasserista y un servidor también las hemos utilizado varias veces. [Tengo mucha experiencia en foros, y lo que suele entenderse por gritar es poner todo el comentario en mayúsculas.]

Un saludo.

Antagonistas -

Para JCAH
Moderación en tu lenguaje. Escribir con mayúsculas -recordamos a todos- es gritar.
Y aquí no grita ni el señor B. (hace cosas peores)
Así que, cuidado con los reincidentes.

RAMIRO LEDESMA, ¿NAZI? -

RAMIRO LEDESMA, ¿NAZI?
A. A.

Las insinuaciones —nada de análisis rigurosos, ¿para qué?— sobre que Ledesma habría sido un nazi son, en absoluto, gratuitas e incompatibles con la verdad histórica.
En el discurso ramirista no existen, ni de lejos, conceptos tales como el de Reinblut (pureza de sangre), propios del racismo nacionalsocialista. En los sucesivos programas redactados por Ledesma desde 1931 no aparece un solo epígrafe sobre eugenesia —tema, por cierto, muy extendido en la literatura anarquista de aquellos años—, prohibiendo la inmigración, o que insinuase una futura legislación sobre extranjeros, menos aún de su expulsión o de que sólo puedan ser considerados como ciudadanos los de sangre española.
Ni en el manifiesto político de marzo de 1931 llamado de La conquista del Estado, ni en el de fundación de las JONS, de octubre de ese mismo año, hay una sola línea que recuerde, ni siquiera vagamente, las proclamas y programas nacionalsocialistas anteriores a 1933, y la posterior legislación racial del III Reich.
Su admiración por las revoluciones bolchevique rusa, nacionalsocialista alemana y fascista italiana —así como por los planistas franceses (antinazis y anticomunistas) o por la Turquía de Ataturk—, lo fueron en tanto que revoluciones nacionales y antiliberales. Nunca —repetimos, nunca— como modelos a importar.
No deja de ser una ironía de la historia que quienes, hasta 1953 —e incluso con posterioridad— habían sacralizado hasta el paroxismo más nauseabundo el nombre de Stalin [1] (Dolores Ibárruri, Rafael Alberti, Pablo Picasso, Santiago Carrillo y un larguísimo etcétera) pasen ahora a engrosar la nómina de starlettes de la democracia española, y Ledesma Ramos se convierta en un inquilino del desván de los monstruos.
¿Por qué? Misterios de la propaganda política...
Ledesma tampoco fue, en absoluto, un antisemita como, por ejemplo, malintencionadamente afirma Julio Rodríguez-Puértolas (Literatura fascista española, v. 1 “Historia”, AkaI, Madrid, 1986, p. 42). Constatar, como hizo Ledesma Ramos, y como han hecho a lo largo de la historia del siglo XX cientos de autores, que Carlos Marx era judío no es propalar una falsedad: lo era y de una rancia estirpe de rabinos de Tréveris (Alemania).
Resulta muy curioso —y hasta aleccionador— que Marx llamara —¡esta vez sí!— con odio y desprecio “pequeño judío”, “judío ridículo” y “judío negro” (v Julien d’Arleville, Marx, ese desconocido, Acervo, Barcelona, 1972, pp. 158 y ss.), entre otras lindezas, a Ferdinad Lassalle y el fundador del socialismo científico no haya pasado a la historia como racista, xenófobo o nazi.
Algunos autores han insinuado, por último, que el flequillo de Ledesma vendría a ser una emulación capilar del, por otra parte, muy común por aquella época peinado del Führer. Si tanto le gustaba el look Hitler a Ledesma, ¿por qué narices no se dejó éste crecer el bigote? El hecho de que historiadores —entre ellos alguno en principio serio, como el norteamericano Stanley G. Payne— se dejen seducir con pruebas tan evidentes —lo que podríamos llamar la teoría capilar del nazismo o algo por el estilo—, demuestra hasta qué punto no estamos ante pinceladas propias de historiadores quisquillosos, sino ante auténticos desarreglos de cerebros inquisitoriales.
Porque de eso se trata, ¿no?.

NOTAS:

[1] A propósito dc Stalin: según cl historiador Eric J. Hobsbawm, el padrecito envió a la muerte entre 1929 y 1936 a unos 20 millones de rusos. Para Dimitri Vololkogonov, sólo entre 1937 y 1938, ordenó la ejecución de 14 millones de personas. Según Valeri Trotski la cifra definitiva rondaría los 15 millones. Por último, para el historiador Paul Johnson, sólo en el año 1942, Stalin habría eliminado a 10 millones de campesinos, entre ellos varias minorías étnicas (El Mundo, 13-VII-1997, p. 21). Y, sin embargo, Stalin no ha pasado a la historia como... nazi.

jcah -

strasserista, se demuestra una vez más que eres un mentiroso. Se te piden las citas en las que Ramiro se define como socialista y sales por peteneras, porque está claro que no existen esas citas, PORQUE MIENTES.

Y otra mentira tuya es eso de que el Mein Kampf se publicó por fragmentos en "la Conquista del Estado". Lo único que se publicaron fueron los 35 puntos del NSDAP, junto a alguna reseña de actos, pero nada más. Así que de nuevo MIENTES. Y de ello no se puede deducir que Ramiro fuera nazi. Era muy habitual que en la prensa jonsista y falangista se informara de otros movimientos europeos. O sea, que no te enteras ni del nodo, o te han engañado o mientes a sabiendas.

Tú no eres continuador de la línea política de Ramiro porque sencillamente no tiene ni repajolera idea de su obra política y de lo que significa. Te agarras a cuatro tonterías que has escuchado para inventarte un Ramiro nazi o socialista en función de tus intereses.

Tened la valentía de presentaros como sóis y dejad de utilizar mascaradas como la de strasserista, ramirista, socialista, etc para ocultar lo que sóis: nazis. Y pedirle cuentas de "derechoso" a vuestro lider Hitler después de cargarse vilmente al ala más social del partido, en vez de pedirle cuentas a un José Antonio que adopta en su integridad el ideal nacional-sindicalista que crea Ramiro y, si cabe, le hace mayores aportes sociales con lo de la autogestión de las empresas y la participación de los trabajadores en los benficios, cosa que ni Ramiro había esbozado.

Ya vale de manipular. RAMIRO ES NACIONAL-SINDICALISTA, PORQUE ÉL MISMO SE DEFINE ASÍ, NO NR, NI NAZI, NI SOCIALISTA.

Lee más.

Cordura -

Amigo NR:

Hombre, me refiero a lo que, creo, todo el mundo sabe: que aun después de salir de Falange, y ya en el 36, Ramiro se ofreció para lo que José Antonio y Falange pudieran necesitarle.

Por ejemplo, leemos en http://www.filosofia.org/ave/001/a016.htm:

"En mayo de 1936 visitó a José Antonio en la cárcel Modelo de Madrid y se ofreció a Falange para todo."

De ahí que yo dijera, aunque no sólo por eso, que el asunto del apoyo o no de Ramiro al Alzamiento Derechoso me parece oscuro. Pero insisto que yo no me tengo por experto en este asunto.

Un saludo.

strasserista -

JCAH,yo no necetito leer nada,ya en el periodico "la conquista del estado",Ramiro pública extractros del "MI LUCHA", eso demuestra qué sentia simpatias hacía el (nacional-socialismo),amén de otros textos.Yo no necesito legitimar nuestro sozialismo,utilizando a ramiro pues es el exponete del socilismo-nacional y nuestro referente ó mejor dicho para qué té enteres nosotros somos los continuadores de la linea política de las JONS,RESISTENCIA,es;la linea continuadora de ese pensamiento político.Además no quiero entra en un díalogo de "sodos".

fdo:goebbels.¡NO PARAR HASTA CONQUISTAR!

jcah -

strasserista, yo no me tengo que leer todos esos libros que dices porque conozco la obra política de Ramiro y la he leído bastantes veces.

Y en ella nunca se define como "socialista", es más le mete mandobles de todo tipo a los "socialistas". Así que va a resultar que el que debes leer eres tú.

Por último resulta patético que llames "derechista" por rebatir las mentiras que dices. Pon aquí las citas donde Ramiro se define como socialista o si no, deja de decir majaderías.

A ver si dejáis de utilizar a Ramiro como pantalla para encubrir vuestras ideas nazis. Primero os llamáis socialistas para evitar identificaros como lo que sóis (nacional-socialistas) y luego utilizáis a Ramiro para legitimar ese supuesto socialismo, al carecer de referentes presentables en españa. La jugada está clara y por eso no cuela.

strasserista -

JCAH,yo no me invento nada,sólo tienes qué leer-entre los ya públicados de siempre-los editados por "Ediciones Nueva Republica";también puedes tomarte la molestia de leer con detenimiento,lo que Cuadrado Costa;conocedor del pensamiento "Ramarista",analiza en sus escritos públicados en "Ramiro Ledesma Ramos,um Romanticismo de Acero".Sí no te gusta tal definición no es problema mio,a no ser qué seas de derechas ó no te guste como Ramiro se autodefíne;también puede ser qué seas un intransigente "joseantoniano";en cuyo caso es imposible razonar.
¡No Parar Hasta Conquistar!

jcah -

strasserista, no te inventes cosas, anda. Ramiro Ledesma en ningún momento se define como socialista.

NR -

Estimado Cordura:

Le agradecería mucho, que si le es posible, me reseñartá aquí -con el permiso del amigo Beltrán-, las fuentes documentales en las que se basa para afirmar que RLR colaboró con Primo de Rivera.
Como admirador del fundador del Nacional-Sindicalismo español, estoy muy interesado en todo lo relacionado con su ideología/vida.
Textos sobre/de RLR, en la web Nuestra Revolución: www.ramiroledesma.com

strasserista -

izquierda-nazional,no sigifica ser-izquierda marxista-,significa;sozialismo nacional,superación del binomio,izquierda derecha y en eso estriba el armazón idelogíco de las JONS y sú fundador Ramio ledesma ramos.Cualquiera que lea sus textos pude ver qué siempre habla de social ó socialista cuando se refiere a sus propuestas idelogícas;cualquiera se pude entretener y tomarse la molestia de leer el libro "Ramiro Ledesmas Ramos,un romanticismo de acero",se percatara de las diferencias filosoficas y de visión del mundo qué le separan de la falange.
¡No Parar Hasta Conquistar!

Antagonistas -

Creemos que la mención al PCE -a su base sociologica especialmente- se basa en un dato poco conocido. Como la Falange, antes de 1936 el PCE era un mero grupúsculo que obtuvo un diputado -Bolívar- que ni siquera era comunista.
Aparte del apoyo soviético, la base social-militante se multiplicó exponencialmente con el estallido de la contienda. Ahora Bien; como Joaquín Maurín, recordara ni Psoe, ni Izquierda Republicana, el POUM creció, Ni UGT,, ni CNT: perdieron afiliados, antes al contrario. ¿Qué pasó? De donde no mana no hay.
En 1936, dos partidos de masas fundamentales en la II República ya no existían. la CEDA de Gil-Robles y el Partido Radical de Alejandro Lerroux. No hace falta ser un lince para constatar que el traspaso de masas de los "jabalíes" de Lerroux al PCE, por un lado, y el de ex-cedistas a la FET en el otro bando hayan sido determinantes.
Sobre el papel de Ledesma en esos hechos que mencionas están claros. Las diferencias táctica con JoseAntonio sobre qué hacer en 1934 durante la revolución de asturias, conllevaron su salida-expulsión de Fe-Jons. Y en 1936 Ramiro Ledesma ni participó, ni conspiró, ni estaba al tanto del 18 de julio. Lo sufrió solamente con su muerte. No por alzado, sino por fascista.

Cordura -

Interesantísimo, aunque varias de las afirmaciones requerirían ser argumentadas y/o documentadas. Por ejemplo, esa adscripción "radical-burguesa" que se le imputa al PCE de la II República.

Al margen de ello, conviene recordar el oscuro papel que Ramiro (y conste que no dudo que fuese un revolucioanrio genuino) desempeñó tanto frente a la revolución de 1934 como en el comienzo de la Guerra Civil. E insisto en lo de "oscuro" porque sé que hay distintas opiniones al respeto, y además no soy yo quién para pontificar sobre un tema que ni remotamente domino (sí sé, por ej., que se puso al servicio de José Antonio y de su Falange cuando estaba próximo el Alzamiento Derechoso).

En manos de otros de por aquí, sin duda más sabios al respecto, lo dejo.

NR -

De momento solo hipermetromía... Gracias por estos textos.
Salud y Socialismo,
NR

RAMIRISTA -

Interesante el Manifiesto. No lo habia leido en su momento.Creo que todo lo que sea renovar el pensamiento de Ramiro Ledesma es pertinente.
¡Arriba los valores hispánicos!

Beltrán -

¿Mejor así? A ver si es que tienes presbicia, cachondo.

NR -

Beltrán, nos vas a dejar ciego, con el tamaño de la letra :-)))

Un saludo