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11-S: LOS MOTIVOS DE UNA GUERRA por Vincenzo Vinciguerra

11-S: LOS MOTIVOS DE UNA GUERRA  por Vincenzo Vinciguerra

Publicamos a continuación la tercera parte del Documento "Reflexiones ante el 11-S" escrito por el camarada-preso político revolucionario Vincenzo Vinciguerra durante aquellos dias, y traducido y editado por nosotros para la Web de Resistencia.

A punto de cumplirse el sexto aniversario de aquellos hechos, bien vale recordar las auténticas motivaciones históricas del Imperialismo para desencadenar su "cruzada" y el inalienable derecho de los pueblos oprimidos a defender su libertad, su dignidad y su independencia frente a los Devoradores del Mundo: los Estados Unidos de Israel.

Y que mejor que reproduciendo las palabras de un soldado-político cuya misma existencia es un desafío permanente a la arrogancia de los represores democráticos.

Confiando en la Victoria final de los oprimidos sobre los opresores (Línea Antagonista)

(30 de octubre de 2001)

 

Desde el 11 de setiembre, sin cesar, sobre diarios, periódicos, televisiones públicas y privadas arrecia una propaganda de guerra que, obediente a las órdenes impartidas desde los Estados Unidos, debe convencer a la gente de que existen las fuerzas del Bien, representadas por América y sus aliados, y las del Mal, identificadas con el "terrorismo internacional" del cual el máximo exponente es hoy Osama Bin Laden, el jeque saudí que ha osado desafiar a la Casa Blanca. Obsesiva, martilleante, reiterada hasta la nausea, la campaña sobre el "terrorismo internacional" de marca árabe es una fábula, la enésima, producida por los departamentos de guerra psicológica de los servicios secretos americanos e israelíes que ven la ocasión de destrozar definitivamente toda resistencia árabe a las pretensiones de sus gobiernos de imponer la supremacía israelí en Oriente Medio como garantía de los intereses militares, políticos y económicos de los USA.

Las medidas antiterroristas dispuestas por el gobierno italiano, con el apoyo de la oposición, mediante nuevas leyes y la "defensa" de los objetivos "sensibles" confiada a los militares, destinados a dar protección a la Sábana Santa de Turín, monumentos, iglesias, sacristías, pretende reforzar el convencimiento general de que el país está en peligro, amenazado por los "terroristas" del pérfido Osama Bin Laden. Y sin embargo, no es verdad. Italia no ha sido considerada hasta ahora un enemigo por los árabes combatientes por la simple razón de que siendo un enano político y militar, nada grave ha podido cometer contra el Islam. Al contrario, lo cierto es que la historia de la política exterior italiana durante el último siglo ha sido la del apoyo a los árabes en su lucha contra el imperialismo británico e israelita, amparada en la aquiescencia de la Iglesia católica al menos hasta la muerte de Pablo VI. Puede convertirse en un enemigo, y por tanto en un objetivo, desde el momento en el cual el gobierno actual y la oposición (por así decirlo) han emprendido la aberración política de implicar a las fuerzas armadas en la guerra americana contra el Islam, en beneficio también de ese Vaticano que se siente amenazado por la religión islámica. Mientras el itálico enano distribuye a sus soldados en defensa de la estatua de santa Genoveva, se aplica en el mejor modo de lustrarle las botas a Bush e inunda las telepantallas con teleseries y películas de carácter religioso, nosotros asistimos a un capítulo de una guerra iniciada muchos años antes.

A finales del siglo XIX, abatidos por los continuos ataques de los que eran objeto, los judíos rusos comenzaron a buscar una vía de salvación que les llevara a tierras más hospitalarias, lejos de las persecuciones que la Iglesia ortodoxa y el tradicional antisemitismo ruso desencadenaban periódicamente contra ellos. Por centenares de miles, por millones, los judíos rusos abandonaron una tierra hostil para refugiarse en los Estados Unidos (en 1914 se habían establecido allí más de dos millones y medio) y en los dominios británicos. Pero una minoría de judíos decidió que debía volver a la Tierra Prometida, a aquella Palestina que representaba históricamente su tierra de origen. Entre 1883 y 1889, el movimiento Chibbat Zion (Amor por Sión) recaudó fondos para posibilitar el éxodo de los judíos hacia Palestina en una medida muy modesta, hasta el punto de abocar al fracaso al movimiento sionista si en su favor no hubieran intervenido personajes de la alta finanza europea, como el barón Edmond James de Rothschild que, en el mismo período, donó una cantidad equivalente a 1,6 millones de libras esterlinas.

El credo sionista afirmaba que "cualquier hijo de Israel que reconozca que no hay salvación para Israel, a menos que se cree un gobierno en la Tierra de Israel, puede ser admitido" en las asociaciones que poco a poco van proliferando sin obtener, sin embargo, el apoyo más que de una ínfima minoría de judíos. Por lo tanto, la aventura del retorno a Palestina para fundar allí el Estado de Israel, no brotó del sentimiento de un pueblo sino que fue fruto de una fanática visión mesiánica de escasísimos intelectuales israelitas que, fortalecidos por el apoyo de la gran banca judía europea, pusieron en marcha el fatal engranaje de la reconquista, tras dos milenios, de una tierra que ahora pertenecía a los árabes.

En un principio mediante el dinero, adquiriendo un terreno tras otro, una casa tras otra, los judíos comenzaron a crear sus asentamientos estables en Palestina, sin provocar fricciones con la población local. Entre tanto, el 29 de agosto de 1897, en Basilea, fue fundada la organización sionista dirigida por Theodor Herzl, en el transcurso de un congreso en el que participaron cerca de 250 delegados de 24 países. Es el inicio de la tragedia que todavía hoy vivimos. No es el retorno de los judíos a Palestina lo que los sionistas sueñan, es la refundación del Estado de Israel, con la expulsión de los árabes palestinos de sus casas, de sus tierras, expropiación de sus bienes y, si es necesario, la privación de sus vidas para hacer sitio a los judíos que regresen.

La llegada de los judíos a Palestina, su penetración sutil cada vez más y más amplia mediante la adquisición de terrenos siempre más numerosos, comenzó a provocar la reacción de todos los que empezaron a comprender que muy pronto los judíos habrían de sustituir la fuerza del dinero por la fuerza de las armas para obligar a los árabes-palestinos a abandonar su tierra. En marzo de 1911, 150 palestinos remitieron al Parlamento turco un telegrama de protesta por la continua adquisición de terrenos por parte de los judíos. El gobernador turco de Jerusalén, Azmi Bey, admitió que, aun no siendo antisemita e incluso apreciando "la habilidad económica de los judíos", "ninguna nación, ningún gobierno podría abrir los brazos a grupos…que tienen la intención de apoderarse de Palestina, la cual nos pertenece".

La primera guerra mundial modificó los equilibrios de fuerzas en la zona. Siguiendo intereses ajenos al pueblo palestino, Francia e Inglaterra se dieron cuenta ya en 1916 que el lobby judío en los Estados Unidos era tan fuerte como para conseguir que estos últimos entraran en guerra a su lado contra Alemania, de este modo se consideró oportuno apoyar al movimiento sionista y la fundación de un Estado judío en Palestina. El 2 de noviembre de 1917, vio la luz la llamada "declaración Balfour" que sancionó el reconocimiento oficial de Gran Bretaña de la "creación en Palestina de un hogar nacional para el pueblo judío". Nadie consultó a los árabes, nadie se ocupó de su suerte. La alta finanza judía y el imperialismo británico acordaron simplemente que Palestina debería convertirse en un Estado judío "cuya importancia es mucho más profunda que los deseos y prejuicios de los setecientos mil árabes que viven ahora en ese antiguo país". Fue una sentencia de muerte para el pueblo palestino, de la cual entonces pocos se dieron plenamente cuenta. El 28 de abril de 1930, Menahem Ussishkin, presidente del Fondo nacional judío declaró a la prensa que los demás "habitantes…deben ser evacuados. La región debe ser nuestra. Nuestra meta es más grande y más noble que el simple respeto de algunos centenares de miles de fellahim [campesinos] árabes". Palabras de desprecio que anuncian lo que sucederá después.

Los acontecimientos políticos europeos, la simpatía de los árabes hacia los regímenes italiano y alemán que veían oponerse al imperialismo británico y de los que esperaban recibir ayuda para su liberación, volvieron a Gran Bretaña menos predispuesta hacia el movimiento sionista y a su pretensión de eliminar a los árabes-palestinos a fin de hacer sitio a un Estado judío. La respuesta fue sangrienta: el 6 de noviembre de 1944, militantes hebreos de la banda Stern asesinaron a lord Moyne, ministro británico residente en Oriente Medio, como consecuencia de la reanudación de las hostilidades contra Inglaterra que el jefe del Irgun Zevai Le´umi, Menahem Begin, había anunciado el 1 de febrero del mismo año. No había concluido aún la segunda guerra mundial, cuando los judíos desencadenaban en Palestina una sangrienta guerra de guerrillas que se proponía como doble objetivo el de obligar a Gran Bretaña a respaldar el nacimiento del Estado judío y a los árabes-palestinos a marcharse por la fuerza, so pena de muerte. Son páginas olvidadas en las que se ha escrito con la sangre de los pobladores árabes la política de terror aplicada por Ben Gurion, Menahem Begin y por los demás dirigentes judíos hasta alcanzar la meta de la fundación del Estado de Israel.

El 22 de julio de 1946, los hombres del Irgun, dirigidos por el futuro premio Nobel de la paz Menahem Begin, hacen saltar por los aires un ala entera del hotel King David de Jerusalén, sede del Mando militar británico, matando a 91 personas, mayoritariamente civiles. El 1 de marzo de 1947, en Tel Aviv, los militantes del Irgun matan a más de 20 soldados británicos, hiriendo a otros 30, en ataques por sorpresa. El 29 de julio de 1947, Menahem Begin manda ahorcar a dos sargentos británicos, que habían sido secuestrados el 12 de julio anterior, y hace colocar explosivos en sus cuerpos, de modo que un oficial inglés cae herido al intentar moverlos. El "Times" de Londres comentará: "La brutalidad nazi no lo hubiera sabido hacer mejor".

La política del terror, ejecutada con feroz determinación por los dirigentes judíos obtiene resultados concretos. Es opinión común de los historiadores que "los métodos draconianos del Irgun, aunque moralmente discutibles, fueron decisivos" para obligar a Inglaterra a abandonar a su suerte Palestina. A Inglaterra la sustituyeron los Estados Unidos. No vinculados por pactos, tratados, promesas, lazos históricos con los árabes, los Estados Unidos asumieron en la zona el papel de tutores, financiadores, protectores de los judíos a los cuales garantizó la formación de un Estado a costa de los árabes, lo que se convierte en objetivo primordial de la política de la Casa Blanca. Sin el freno de la presencia británica, antes bien, animados por el apoyo americano, los activistas judíos del Irgun y de otras organizaciones desencadenaron una campaña de atentados contra la población árabe.

En solo dos atentados, el 13 y el 29 de diciembre de 1947, los hombres de Begin mataron a 80 árabes e hirieron a 37. El 30 de diciembre de 1947, lanzaron granadas de mano contra un pequeño grupo de árabes que esperaba el autobús en Haifa, matando a 6 personas e hiriendo a una docena. La reacción árabe, esta vez, provocó la muerte de 39 judíos y las heridas de otros 50, linchados por la masa enfurecida. Fue el pretexto para una masacre, la enésima, contra una aldea árabe. El 31 de diciembre de 1947, las escuadras armadas de las formaciones judías penetraron en Bala al-Shaykh y mataron a 60 personas, en su mayoría mujeres y niños. El 4 de enero de 1948, nuevamente militantes judíos hacen estallar un camión lleno de explosivos ante el ayuntamiento de Giaffa, donde tenía su sede el Comité nacional árabe, provocando su derrumbe y la muerte de 26 personas. El 5 de enero de 1948, una incursión contra el hotel Semiramis de Jerusalén, considerado erróneamente sede de los irregulares árabes, acaba con la muerte de 26 civiles inocentes. El 28 de febrero de 1948, un coche-bomba colocado por militantes judíos provoca la muerte de 30 árabes y heridas a otros 70, todos civiles.

También los métodos nos traen a la actualidad. Coches-bomba, camiones repletos de explosivo, casas y hoteles hechos saltar con la gente dentro. Sólo que no fueron los árabes quienes los emplearon los primeros, sino los fundadores del Estado de Israel. Verdad incómoda, pero que no hay que callar. El 9 de abril de 1948, las formaciones judías del Irgun de Begin y del Lhi atacan la aldea árabe de Deir Yassin. "La conquista de la aldea ha sido ejecutada – escribirá en su informe un oficial hebreo – con extrema crueldad. Familias enteras – mujeres, viejos, niños – aniquiladas, y cadáveres apilados…. Algunos prisioneros, incluidos mujeres y niños, transferidos a lugares de detención y allí brutalmente eliminados por sus captores". No se hablaba de todo esto en los motivos por los cuales Menahem Begin, entonces jefe del gobierno israelí, fue distinguido con el premio Nobel de la paz. Occidente ha borrado incluso la memoria de las atrocidades cometidas en nombre de Israel. Los árabes no, no pueden olvidar por la sencilla razón de que siguen muriendo, como entonces, a menudo a manos de los mismos hombres, ayer oficiales del ejército israelí, hoy ministros y jefes de gobierno.

Es el caso de Ariel Sharon, "el oficial israelí que se había convertido en símbolo de la política de la represalia", como escribe un historiador hebreo. ¿Desde hace cuántos años es este hombre símbolo de la represión y del terror para los árabes-palestinos? Al menos desde 1953, cuando fue creada, en el mes de agosto, la Unidad 101, confiada precisamente al mando de Sharon, con una única misión: efectuar incursiones, infiltraciones y represalias. Ariel Sharon ejecutó la primera de ellas contra la aldea de Qibya, en la noche del 14 de octubre, masacrando a 60 habitantes, mujeres y niños incluidos. El 24 de noviembre de 1953, la ONU condenó al gobierno israelí por esta matanza, pero todo siguió como antes y cada uno en su puesto, como Ariel Sharon.

Lo vuelven a encontrar los palestinos en 1982, esta vez como ministro del gobierno Begin. El 16-17 de setiembre, los falangistas cristianos con la complicidad del ejército israelí, entran en los campos de refugiados de Sabra y Shatila, en Líbano: "…la matanza continuó ininterrumpidamente durante más de 30 horas. Los falangistas asesinaron a civiles –individuos y familias enteras- de forma metódica y deliberada. Un niño fue pateado hasta la muerte por un miliciano provisto de botas claveteadas, otros fueron asesinados colgándoles al cuello bombas de mano, otros fueron también violados y descuartizados". Ariel Sharon, ministro de Defensa, podía evitar la masacre. Los servicios secretos israelíes le habían informado con anticipación de todo cuanto los falangistas cristianos estaban preparando. No hizo nada. Peor aún: los militares israelíes lanzaron bengalas luminosas para facilitar la marcha de aproximación de los falangistas cristianos hacia los campos de Sabra y Shatila. Los muertos fueron 900, según estimaciones aproximadas de los propios servicios secretos israelíes, probablemente muchos más. La resonancia de la masacre obligó al gobierno presidido por Menahem Begin a nombrar una comisión de investigación para depurar eventuales responsabilidades israelíes. El 8 de febrero de 1983, la comisión criticó al propio Begin y fue muy dura con Sharon acusándole de no haber "asumido sus deberes". Pero ni siquiera esto bastó para detener su ascensión en el firmamento político israelí. Los muertos de Sabra y Shatila no pesaban sobre la conciencia de Menahem Begin, Simón Peres y de los dirigentes israelíes: ni sobre las de sus aliados americanos y europeos.

El 28 de setiembre del 2000, otra vez Ariel Sharon, de acuerdo con el gobierno israelí, actúa en primera persona paseándose de forma provocadora por la Explanada de las Mezquitas, en Jerusalén. La reacción de los árabes, legítimamente resentidos, dará paso a la segunda Intifada que ha costado en un año la vida a más de 800 palestinos, muchos, demasiados, de ellos niños y adolescentes. Pero para el actual primer ministro israelí esto no cuenta.

El conflicto árabe-israelí está todavía en curso, si bien es el primer y principal motivo de enfrentamiento con el mundo islámico, no es el único. Gran Bretaña, Francia y Estados Unidos tienen concretas y comprobadas responsabilidades en la explotación de los recursos petrolíferos de la región, cuyo control han adquirido por la fuerza, con golpes de Estado, con gobiernos corruptos. Fueron los Estados Unidos, junto a sus fieles aliados británicos, quienes derrocaron en 1953 al gobierno nacionalista de Mossadeq, culpable de querer nacionalizar la industria petrolífera, para imponer en su lugar un régimen corrupto que tendrá, posteriormente, en el shá Reza Pahlevi su dictador implacable. El proceso de occidentalización impuesto por la política del Shá conlleva una durísima y despiadada represión contra los opositores internos. Pero no existe un gobierno americano o europeo que advierta de la necesidad de intervenir para frenar las constantes violaciones de los derechos humanos perpetradas por Reza Pahlevi y sus hombres. Se lamentarán las democracias occidentales, cuando expulsado por el furor popular el tiránico Shá, ocupe su lugar Jomeini que propiciará el proceso inverso, el de volverse a apropiar de los valores del Islam contra la imposición forzada de la cultura americana.

No será a causa de una fatídica coincidencia que Saddam Hussein, el dictador iraquí alumno por su laicismo de los Estados Unidos, desencadene una guerra de agresión contra Irán, en el curso de la cual utilizará incluso armas químicas. Al final, el balance será de al menos un millón de muertos, que no pesan tanto en la conciencia de Saddam Hussein como sobre la de los regímenes occidentales que fomentaron la guerra para reafirmar sus intereses y detener el proceso de islamización de la región.

La misma lógica perversa se vuelve a encontrar en Argelia. Cuando el Frente de Salvación Islámico venza en las elecciones y adquiera el derecho a gobernar el país, Francia y los países occidentales inducirán a los militares a dar un golpe de Estado, instaurando un régimen militar y reprimiendo ferozmente a los opositores islámicos. Al día de hoy, el precio por mantener a Argelia en la lista de países musulmanes "moderados" y occidentalizados, ronda los 100.000 muertos, cifra por defecto.

Silencio total, también, sobre Egipto y la represión dirigida por el régimen de Mubarak contra los "Hermanos musulmanes". ¿Cuántos muertos? ¿Cuántos encarcelados, cuántos torturados? Nada se sabe. Occidente no critica a sus aliados corruptos, con tal que sean sumisos hacia su política. Prueba de ello es el ocaso de Saddam Hussein que, culpable de haber puesto en entredicho, con la invasión de Kuwait, los equilibrios pro-americanos en la región y los intereses de las sociedades petrolíferas, ha sufrido el ataque de América, la invasión de su territorio y la aplicación de un embargo, para obligar a los iraquíes a derrocarlo. Un embargo total, feroz y despiadado que, en diez años, ha costado la vida al menos a un millón de iraquíes, en su mayoría niños, ancianos, mujeres, muertos por desnutrición y enfermedad. Un millón de muertos para los que nadie pide justicia.

Ahora toca a Afganistán. Han sido los americanos, los saudíes y los pakistaníes los que organizaron el movimiento talibán y les permitieron conquistar casi enteramente Afganistán. La causa del apoyo a los estudiantes coránicos residía en el hecho de que, siendo éstos de filiación sunnita, representaban un obstáculo a la expansión de Irán chiíta en el área. Cálculo no equivocado, porque la represión talibán contra los chiítas afganos ha sido durísima y ha provocado un verdadero éxodo, del que nadie ha hablado nunca prefiriendo poner el acento en la aplicación delirante de las normas coránicas relativas a la mujer.

Hoy, los talibanes son el nuevo enemigo de los Estados Unidos. El "monstruo" al que aniquilar por ser culpable de haber hospedado a Osama Bin Laden, el multimillonario saudí transformado en un enemigo implacable de la alianza israelo-americana. No miente Osama Bin Laden, cuando afirma que la responsabilidad de los ataques a los Estados Unidos el 11 de setiembre recae sobre la "política de América" frente al mundo islámico. ¿Cuántos años hace que Occidente ha dado a los árabes la prueba de que sólo la fuerza cuenta, la del dinero y las armas? ¿Desde cuántos decenios América apoya la política de genocidio dirigida por Israel para afirmar su supremacía en la región? ¿Cuántos golpes de Estado, insurrecciones armadas, represiones despiadadas, guerras ha fomentado la política americana, israelí y occidental en el área medioriental? Tantos son que es imposible enumerarlos todos. Como total ha sido el "olvido" de los medios de comunicación occidentales frente a las tragedias de los pueblos musulmanes. Ningún eco ha llegado jamás de los gritos de los condenados y de los torturados por parte de los regímenes que desempeñaban una política pro-occidental, mucho menos se ha levantado alguna voz contra Israel, único Estado en el mundo en permitir el uso legal, codificado por ley, de la tortura. Ni siquiera esto ha provocado escándalo y removido las conciencias.

De esta amalgama secular de guerras, exterminios de masa, asesinatos, torturas, represión, hambre, explotación, petróleo y cárceles, éxodos bíblicos y desesperación surgen, destacándose sobre los cielos de los Estados Unidos, los aviones que se estrellaron contra el Pentágono y las Torres gemelas de Nueva York. Dentro de estos aviones secuestrados, no volaban solamente 19 combatientes islámicos lanzados al martirio, con su carga de inconscientes pasajeros americanos, porque con ellos estaban los millones de muertos que el Occidente opulento, poderoso y despiadado ha provocado en nombre de sus intereses, de sus religiones, de la afirmación de su poder. Es de un genocidio negado del que surge el ataque del 11 de setiembre de 2001, casi en coincidencia del aniversario de las matanzas de Sabra y Shatila, olvidado igual que sus numerosas víctimas mientras uno de sus responsables es primer ministro del Estado de Israel.

Incluso aquellos que, por su parte, no se sienten capaces de justificar los ataques del 11 de setiembre contra los Estados Unidos, deben comprender por honestidad intelectual que no han sido motivados por una perversa sed de sangre de los "terroristas internacionales"; que la propaganda de guerra, dirigida a hacer olvidar lo que hemos recordado siempre, no debe ofuscar las mentes y torcer el juicio; que el problema no es condenar los bombardeos americanos en Afganistán y a los "terroristas" mediante una elección aparentemente salomónica, sino intervenir sobre las causas que han determinado tales ataques. Y las causas pueden resumirse en una sola: falta de justicia hacia los oprimidos que han visto a sus masacradores elevados, en Occidente, sobre los altares de la política y de la historia mientras que un velo de complicidad se extendía sobre sus delitos. Con las Torres gemelas han caído la certidumbre de la impunidad occidental y americana. Y esto produce miedo, no el inexistente "terrorismo internacional", fórmula utilizada para no reconocer las culpas propias pasadas y presentes.

Los enanos políticos italianos no saben qué idear para apoyar a los Estados Unidos. Ahora se han inventado incluso una delirante manifestación pro-americana, una demostración pública en la cual desfilar por millares tremolando las banderas de los Estados Unidos. Han olvidado que la tragedia italiana de los años setenta lleva el sello de los servicios secretos americanos e israelíes. Una verdad nunca proclamada oficialmente porque la entera clase política italiana, sin excepciones de ningún género, desde los missinos a los comunistas han levantado un valladar para que ésta no emergiera en toda su claridad. La tragedia de Oriente medio ha tocado de lleno a Italia a partir del 10 de junio de 1967, fecha en la que la Unión Soviética rompió sus relaciones diplomáticas con Israel, seguida de todos los países de la Europa del Este, excepto Rumania. El 1 de noviembre de 1967 es nombrado jefe de Estado mayor del Arma de carabineros el coronel Arnaldo Ferrara, hermano de un diputado del Partido Republicano, israelita. Permanecerá en el cargo diez años, los años de las masacres de plaza Fontana, Brescia, Italicus, de la frustrada masacre de Verona, Génova y muchas otras. ¿Coincidencia? Difícil creerlo. Y nadie, político, magistrado, historiador se ha atrevido nunca a responder la pregunta referente a la necesidad de mantener durante diez años en el mando virtual de los carabineros a un simple coronel, convertido sin moverse de la poltrona, en general de división. Cuando los enanos desfilen por Roma, agitando las banderas de los Estados Unidos, que alguno recuerde a los muertos sin justicia de plaza Fontana y de las masacres italianas, por los cuales un día alguien pedirá cuentas, porque la sangre derramada no se olvida, pesa en el recuerdo de los hombres y de los pueblos, en la conciencia de cuantos hoy asisten impotentes a la definitiva prostitución del país ante el rico amo americano.

Deseo de justicia que hoy se defiende, quiérase o no, sobre las montañas de Afganistán. Y mientras el enano feroz alinea a sus soldados en defensa de la estatua de santa Cunegunda y nos bombardea con películas tipo "Marcelino pan y vino", esperando que las futuras generaciones se asemejen a Fini y a Gasparri, yo miro a esas montañas afganas en las cuales, una vez más, hombres armados con solo su valor afrontan al imperio americano en nombre de principios eternos que se llaman libertad, dignidad e independencia.

 

 

30 comentarios

Hohenstaufen -

Valientes que son esos mozos.
Con los cachorros del nacionalismo pseudorradical catalán, mimados y disputados por los capos del nacionalismo institucional, que tuvieron por lo menos el buen gusto de quemar los caretos de los reyes, no se atrevieron los mozos...

Polizei -

¡Ah, la policía del estado sórdido y desgraciado de deshecho! Como les gusta emplearse a fondo cuando saben que el apaleado no tiene "padrinos".

Cordura -

Vuelvo a pegar el enlace, que reclamaba Braunau, con la declaración del activista pro verdad 11-S detenido y maltratado por la policía (el otro que puse tenía espacios parásitos, de ahí el problema):

http://investigar11s.blogspot.com/2007/09/activista-por-la-verdad-del-11s-es.html

aj -

mis disculpas por lo de simple y superficial
quizá el simple he sido yo por no entenderte adecuadamente.

tu aclaración es buena y estoy deacuerdo con ella.
todos conocemos la "perversidad" del sistema,
el racismo "antiblanco" existe, como el "victivismo feminista" y le da cuantiosos "beneficios" sociales y toda índole a los que los practican, sabedores que el sistema les respalda no por empatia si no por que tambien recoje los "suyos" de otra manera.
ir de "progre" viene bien y "cuela".
estate seguro no es mi caso.
pero tampoco voy de "supremacista" o "identitario etnicista", soy
Social Patriota, y por ende
reconozco como identidad superior o principal "la vertical" no la "horizontal", la que es producto de la política y la historia, no la biológica o naturalista.

saludos

Avizor -

Completamente de acuerdo, AJ, en que el indoeuropeo que se "levanta" contra el semita y camita, si no es tan prooccidental como los demás, está lejísimo de representar una alternativa al sistema occidental.
Y lo mismo que cito al indoeuropeo cito a todo semita, camita, negro o amarillo que tome como enemigo al indoeuropeo, el mero hecho de reducir todo lo humano a lo biológico y tomar como enemigo a otra raza, lo invalida como alternativa.
Pero mi comentario habrá sido simple porque en internet hay que ahorrar líneas, pero no es superficial ni alejado de la realidad. Durante muchos años hemos escuchado ese discurso por parte de varios grupos de personas: que para defender la supervivencia de nuestra raza hay que actuar contra las demás razas.
Observa un equivalente en el presente, en el discurso feminista que justifica la discriminatoria ley de violencia de género (discriminación "positiva"), donde para «proteger a la mujer», cualquier hombre se convierte en culpable y sujeto sin derechos sólo por verse denunciado por su pareja.
Y eso cuela.

Avizor -

Completamente de acuerdo, AJ, en que el indoeuropeo que se "levanta" contra el semita y camita, si no es tan prooccidental como los demás, está lejísimo de representar una alternativa al sistema occidental.
Y lo mismo que cito al indoeuropeo cito a todo semita, camita, negro o amarillo que tome como enemigo al indoeuropeo, el mero hecho de reducirlo lo humano a lo biológico y tomar como enemigo a otra raza, lo invalida como alternativa.
Pero mi comentario habrá sido simple porque en internet hay que ahorrar líneas, pero no es superficial ni alejado de la realidad. Durante muchos años hemos escuchado ese discurso por parte de varios grupos de personas: que para defender la supervivencia de nuestra raza hay que actuar contra las demás razas.
Observa un equivalente en el presente el discurso feminista que justifica la ley de violencia de género, donde para «proteger a la mujer», cualquier hombre se convierte en culpable y sujeto sin derechos sólo por verse denunciado por su pareja. Y eso cuela.

aj -

lo siento pero me parece superficial y alejada de la realidad tu respuesta, avizor.
el "indoeuropeo" que se levanta contra el "semita" y "camita" si no es tan proocidental como los demas, esta muy lejos de representar una alternativa al sistema occidental.

citando al camarada Social Patriota A. Gonzalez:
"basta un repaso de los discursos de muchos supuestos «infantes terribles» o «peligrosos», desde los llamados nacional-revolucionarios hasta los reformistas populistas, pasando por los «reconquistadores» de supre­macías o «edades doradas» del pasado, para darse cuenta que no sirve, en absoluto, para abrir brecha y conformar una nueva mentalidad que se enfrente al individualismo, al unifor­mismo y al econo­micismo asfixiante del mundo actual."

"Sus discursos están sirviendo para todo lo contrario: para justificar y defender la supremacía de este sistema pluto­crático, del «pensamiento único» famoso y sus mecanismos de poder político, social, económico e ideológico, y de paso, y por supuesto, el «status» material privilegiado de los componentes del primer mundo: un nivel económico con­seguido por motivos históricos, coyunturales, y no por méritos de las pobla­ciones o generaciones actuales."

"Todos estos pseudoidentitarios prooccidentales no utilizan mitos «irra­cionales» como pudieron utilizar­los otros grupos en épocas anteriores (esto también sería discutible), o sea, para contrarrestar las fuerzas y artificios eco­nomicistas, evolu­cionistas y uniformizantes en los que se basa el mundo occidental, sino para defender este mismo mundo occidental. Da lo mismo que hablen de «herencias naturales», de los «valores de la civilización» o de «raíces» de cualquier especie. Lo mismo que hablen de defender una religión como del progreso técnico. Lo mismo que hablen de mitos imperiales como de las libertades individuales. Lo mismo que hablen de vírgenes cristianas como de paganos bárbaros. Todos estos cánticos se descubren, si se presta apenas atención, como retórica romántica y espúrea para encubrir la cruda y des­carnada realidad del Occidente, que es lo que acaban defendiendo."


"Durante la guerra fría el elenco de las llamadas «fuerzas nacionales» (re­for­mistas, reaccionarias o conservadoras) tanto europeas como sudamerica­nas, emplearon discursos plagados de llamamientos juveniles revolucio­narios según unos, o defensas viejas de la patria, de la religión, de la familia, o de la raza según otros. Pero todo eso fue utilizado para acompañar e, incluso, respaldar el mundo que públicamente se decía de­testar por injusto, corrompido, desalmado, viciado o degenerado. Aquellas referencias eran, sólo en apariencia, «disonantes» con las del discurso «racional» o con­vencional dominante, pues pronto se podía descubrir que, mientras unos eran simples «radicalizaciones» de alguna de las dos alas del frente político «res­petable», otros eran cantos estériles a la luna, y algunos otros (éstos eran los más graves) eran adulteraciones o caricaturas de valores serios para degenerar bien en aberraciones e insensateces fácilmente atacables por todo el mundo, o en pretextos mixtificadores para recubrir las descarnadas razones reales que mueven al llamado «Mundo libre». Por mucho que los dueños del poder los desprecien con patadas e insultos, estos animales muy poco políticos nunca aprendieron (o aprendieron muy bien) y siempre sirvieron como perros fieles de ese poder."

"Ahora vuelven a las andadas los mismos perros. Todo su presunto rechazo al globalismo desalmado, desnaturalizador y reconvertidor de tierras, pueblos y personas en solares, máquinas y mercancías, todas sus quejas contra esta sociedad formada por humanos reducidos a objetos y sujetos estacionales de producción, de consumo y deshechos en compra­venta, se quedan en un «desagrado» por algunas consecuencias del proceso, pero un proceso que aprueban no sólo como necesario e inevitable, sino como «fruto» del tipo de sociedad que han de defender. Al final no sólo no atacan esa uniformización y esa progresión disol­vente que decían contra la que dicen que luchan, sino que afirman fervorosamente que todos estamos obligados a defender esa homogeneidad apisona­dora para nuestros pueblos, en nombre de una «paternidad» o unas «raíces» (unívocas y homo­géneas) religiosas, vitales, culturales, racionales e identificadoras."


"En definitiva: para social patriotas los pseudoidentitarios occidentales coinciden, descarada­mente, con los mundialistas a los que dicen atacar: coin­ciden nada menos en ver «superior» el «modo de vida» y el tipo de sociedad occi­dental. Nosotros denunciamos que los pseudoidentitarios sólo discrepan de los segun­dos en dos cosas: primero de la sinceridad de los abierta­mente mundia­listas, pues éstos desprecian los cuentos románticos de nostálgicos y mitó­manos, ya que los mundialistas recurren a otros engaños más políticamente correctos para justi­ficar el desenvolvimiento de Occidente; y segundo (y aquí discrepan más rabiosos) porque en vez de reservar ese modo de vida y privilegios socioeco­nómicos para los pueblos elegidos o «avanzados», los mun­dialistas anuncian querer propa­garlo."


"Estos pseudoidentitarios son como los exclusivos de su raza: para ellos Occidente debe quedar reservado para el «mundo avanzado», que para ellos es sinónimo de más dinero, gente «moderna» y aparatos «vir­gueros». En cambio, progresistas y liberales (que tienen la misma idea que los pseudoidentitarios de lo que significa «avanzado») son algo parecido a los «evangeli­zadores»: para ellos Occidente debe «reconvertir» los pueblos infantiles o atrasados del resto del mundo."

"Tanto occidentalistas «exclusivos» como la derecha de los occidentalistas «pro­pagadores» coinciden también en absolver a Occidente en la generación de las desgracias y miserias del resto del globo: para ambos tales desgracias y miserias no son culpa de la destrucción de su hábitat y sus comunidades por Occi­dente. Para los «exclusivos» porque las víctimas son unos primates incapaces de adaptarse a una cultura superior; para la derecha «mundialista» porque esos pueblos todavía no han culminado esa reconversión occidentali­zadora que les extirpe absolutamente todos sus «viejos hábitos»."

"Por eso hemos de combatir la confusión. Por eso hemos de desenmas­carar a los farsantes y arrancar a los pseudoidentitarios la bandera de las identi­dades. Por eso hemos de negar rotundamente que son alternativa a los mundialistas, pues sólo les cabrea que su «tesoro» sea compartido entre los «otros» o sin exigir devociones a ciertos mitos particulares. Habiendo estado «subidos a la parra», les molesta que «los de abajo» se la muevan, bien porque emigren acá, bien porque las empresas se deslocalicen allá, bien porque sus mercaderías desplacen los productos nacionales."

"Por eso que no espere nadie críticas sostenidas a la lógica del capitalismo, ni nada por el estilo, sino incitaciones de odio a otros pueblos, incurriendo en la mayor de las contradicciones, porque si dicen defen­der las identidades de los pueblos y los hechos diferenciales entre culturas ¿Porqué siempre se descubren odiando otras identidades y cri­minalizando justamente esos hechos diferenciales? El que dice amar la bio­diversidad ¿Cómo puede presumir de desprecio por las demás especies?"

"Así pues, ante cualquiera que aparezca esgrimiendo la bandera de la Identidad, hay que emplear la misma precaución radical como cuando vienen con conceptos como defensa de la Patria o de la Libertad. Desconfiar por norma, pues todas estas referencias han sido pervertidas y utilizadas como encubridoras de las razones e intereses más espurios de Occidente. Hay que ver porqué y para qué emplean todas estas ideas. Porque con la confusión se viene una segunda consecuencia: mucha gente acaba por escupir sobre todas ellas, asqueada con el sentido y el contenido que les han dado. Si nos importa la libertad, no tengamos reparo en inquirir con dureza como Lenin y Mussolini. Lenin preguntó «¿Libertad? ¿Libertad para qué?» Y Mussolini desenmascaró a «aquellos defensores de la Libertad que la reclaman y se la apropian para sí, para negár­sela a los demás». Los que levantamos la bandera de las identi­dades hemos de inquirir sin contem­placiones «¿Identidad? ¿Identidad para qué?» y ser implacables contra «aquellos defensores de la Identidad que la reclaman y se la apropian para sí, para negársela a los demás»."

ya sé que he repetido las palabras de A. Gonzalez otras veces,pero "ante mismos argumentos, misma respuesta",
las razones de los "cruzados" son completamente "espúreas", por muchos "cantos de sirena" con los que los disfracen.
no son alternativa a nada, y menos al sistema occidental, como dice Gonzalez son "los exclusivos" de dicho sistema, les molesta que otros "les toquen sus privilegios".
son indentitarios "reduccionistas" e "invertidos", no combaten a Occidente, combaten al resto de identidades que no consideran "suyas".




Avizor -

Supongo que estarán todos de acuerdo que las apelaciones de los nacional-atlánticos a la "religión judeocristiana" y a la "raza blanca" no son más que excusas baratas y sentimentales para justificar su "identidad" (identificación) no con la "religión" ni con una "raza", sino con el dominio internacional del totalitarismo mercantilista.
El cristiano que toma como enemigo al Moro no lo hace porque sea cristiano, sino porque es un "cruzado"... del "Becerro de Oro" y de la Depredación del planeta.
El indoeuropeo que declara enemigo al semita y al camita no lo hace en defensa de su raza sino en defensa del poder total de su partido: el occidentalista.

aj -

amigo Braunau, te agradezco tu respuesta.
no compartimos los mismos referentes pero estamos "mas cerca" en pensamiento político de lo que imaginas.

en el tema particular de Hitler no entro mas a fondo en esta ocasión por que sé que es vuestro referente.

yo me quedé con Niekisch.

aj -

vaya, vaya.
si que tiene guasa si.
esa aclalaración me revela muchas cosas.
no hace falta ser mas explicitos.
la deriva existe, aunque algunos sigan negándola.
todos nos entendemos.

saludos

Antagonistas -

En realidad, los comentarios de sacacorchos y .... no son tales, sino partes del propio ensayo sobre el neo-nacionalismo europeo que no se han incluido en él ya que se trataba de un crítica política compleja del II Congreso de cierto movimiento politico "social-europeo", una de cuyas ponencias congresuales (a la que se refiere la crítica) ha sido "borrada" de las resoluciones y documento de dicho Congreso.
Tiene guasa la cosa..

Braunau -

no creo que lo que defienden los identitarios judeofilos sea lo mismo que defendia la Alemania nazi del coco Hitler... es mas hay muchos comentarios del odiado Führer que hablan al respecto, de que su lucha estaba mas cerca del pueblo arabe, que por ejemplo del frances, a pesar de la proximidad de la sangre... No son dogmas intocables, si no compartes el pensamiento de Hitler estás en tu derecho como hombre libre, que es de lo que se trata, y no un borrego del sistema homogeneopensante que es lo que quiere implantar la elite financiera burguesa para tener consumidores siempre dispuestos... Pero de ahí a criminalizar al tío Adolfo es hacerle el juego a la juderia mundialista y al $i$tema.

aj -

el cruce de comentarios entre sacacorchos y el autor es muy interesante, y suscribo la mayoria de lo que se dice.

pero me asaltan ciertas dudas,
¿no es el "identitarismo etnicista" y las posiciones "identitarias neonazis" (por no decir racistas) las mismas que defendia y profesaba el régimen Nazi de entreguerras.

la marca de la derecha pangermánica y aria es dificil de disimular.
después de años de supuesta "amistad proárabe" de muchos de estos grupos,
la presencia masiva de los tales en la "europa de los elegidos" está destapando un "repentino y nuevo" sentimiento "antimoro" de base claramente "racial" vs "religioso", que para justificarlo acaban repitiendo y aceptando las consignas "antiterroristas bien pensantes".
¿se puede ser tan igenuo de creer que en la situación actual el "sacro Führer ario"
no despreciaria igualmente a los "moros" afincados en la sagrada "europa blanca"?
ya sé que algunos me "juzgaran por sacrílego" por que entienden la política exactamente igual que una religión, hay "dogmas que es mejor no tocar".

no es mi caso.
de todas formas repito, es la praxis politica la que acaba marcando la ideologia y ya se está viendo que la "deriva identitaria de corte etnicista no es ni ha sido nunca un enemigo del sistema y de la globalización.
que no es lo mismo ser "nacionalista" (que es lo que es la derecha) que "nacional" (algo que no ha sido nunca) y que muchos "infantes terribles" que presumian de ser "antijudios", acabaran siendo "antimoros" (lo son ya. la derecha se llame como se llame terminará mostrando lo que es, "derecha".


aj -

para abrelatas.
es cierto, no nos vale.
pero la realidad es que actualmente existen en el mundo muchos movimientos "antagonistas o disidentes" del sistema que levantan distintas banderas y con referentes históricos diversos.
es cierto que no "todos" somos compatibles, yo soy el primero que defiendo eso y no estoy dispuesto a ir a una manifestación con cualquiera,
pero "algunos" si lo somos y el "espíritu del bunker" nos separa, cuando solo la unión entre "praxis" políticas compatibles nos daria la fuerza para luchar con ciertas garantias contra el sistema y la mundialización.
yo no rehuyo el debate historicista político, y defiendo "mis" referentes, pero eso no me impide mirar hacia delante y concentrar mi lucha en el "enemigo presente"
si no somos capaces de hacerlo no hay futuro.
Ramiro nos dió una lección sobre esto:

"Estos son imperativos de tal relieve, que su logro debe estar por encima de todo, presidiendo la empresa revolucionaria de los españoles, tras su grandeza y liberación. Y para darles cara se pisotea todo lo que haya que pisotear, desde la ordenación económica vigente hasta el tipo de vida melindroso y chato de las actuales clases directoras.Las palabras valen poco. Si esa empresa requiere que se verifique al grito de ¡Abajo el fascismo!, pues a ello."

"Cuando llegue el momento de enarbolar las diferencias radicales, nosotros lo haremos; pero mientras tanto, los consideramos como camaradas, y en muchas ocasiones dispararemos con ellos, en afán de destrucción y de muerte, contra la mediocridad y la palidez burguesas"

Ramiro no dejó ser lo que era, pero tenia la suficiente "envergadura política" par ver mas allá de la punta de su nariz.

eso es lo que yo hecho a veces en falta dentro de este "mundillo".

saludos

aj -

respondiedo al amigo Schwarze
Blok si estuviera en Madrid ten la seguridad que asistiria
como patriota socialista
levantando la bandera "rojo-negra".

........ -

Nadie los oye y casi ninguno los vota empezando por ellos mismos.
No importa la lucha continua.
La lucha sempiterna por no seguir siendo “los últimos de ayer, sino los primeros de mañana”.
Mala suerte. Seguirán siendo los últimos de ayer y los últimos de mañana y de pasado mañana.
Abandonada, retomada, fracasada y vuelta a empezar de nuevo con otra táctica, con otro nombre y otra identidad.
Una lucha tan irreal como ellos mismos, como su Europa Identitaria, Paleolítica y Metapolítica proyectada a un Futuro que ya no sueñan ni imaginan porque es un porvenir que no-viene-nunca.
Una lucha retórica asumida y perdida antes de comenzada. Ejecutada siempre en nombre de Otros y en beneficio de Otros.
Huérfanos de sí mismos, envejecidos prematuramente, agotados de esperar el fin como dirian Los Ilegales,se atusan el pelo y se planchan el terno en previsión de formar un remotísimo gabinete europeo de salvación nacional que de ilusión también se vive.
Los “Soldados de Salamina” de la multi-identidad nacional, los últimos de Filipinas del neofascismo español, los nietos de Carrero Blanco y Sánchez-Covisa, los Ramiristas de Thiriart, los franquistas del fascismo rojo, cojo y trampantojo, los herederos sin herencia que todo lo asumen y todo reducen al Liliput de su talla política, moral y personal se han unido al festín del Poder.
Nadie les ha invitado. El camino hacia el poder se lo marca la ley. Luego vendrá la Revolución Europea. Entretanto se conforman con algunas migajas caídas de la mesa presidencial de los señores de la guerra étnica, burocrática y comercial: los viejos truhanes de la vieja Europa Una, Grande y Libre de Moros y Yankis, por este orden.
Confiamos que esta vez hayan cogido su “tren” definitivo y que su linea ferrea avance por un camino sin retorno.
Bon Voyage.
.

Sacacorchos 3 -

.... han comprobado donde apunta la veleta de los vientos estatales y capitales. La dirección de la flecha de los tiempos señala hacia La Meca y La zeca . El Oro y el Moro.
Los “vicentes” del neofascismo marginal y gutural van donde va la gente. Su gente. Esa buena gente de la derecha nacional que bala su miedo ante el feroz sarraceno.
A por ellos....
El Islam y los inmigrantes islámicos son oficialmente el enemigo. En realidad siempre lo fueron. Aunque las actuales euroderechas de urgencia se hayan dado cuenta hace bien poco. Mejor tarde que nunca.
El Islam es el objetivo a eliminar. Actua como “catalizador” de las dispersas y perversas masas subalternas de la diáspora afromagrebí, las cuales quizás de otro modo –inferimos- serían más dóciles, menos peligrosas y acaso más “integrables” en la sociedad euro-occidental como lo son otros inmigrantes extracomunitario.
No hacen falta razones, argumentos o zarandajas varias.
Los islamo-afro-magros existen, persisten y se expanden; luego son. Y son lo que son: el Enemigo porque el Islam lo es. Y el Islam –como dice César Vidal- es la Guerra Santa.
Y la Yihad islámica contra Europa se ha declarado hace bastante tiempo, según nos informan Faye, Del Valle y otros enviados especiales desde Paris y desde Tel-Aviv .

......... -

La Inmigración masiva magrebí o la misma integración europea de Turquia representan un implemento del Islam (en realidad de su registro estadístico) religión “alógena” –según los teóricos de la identidad fetén- como “alógenos” étnica y nacionalmente son los inmigrantes-maleantes de procedencia afromagro y asiático-turcomanoide: islamo-mutantes todos sedientos de sangre blanca, cristiana y laica.
Así que estamos ante una evidente discrimanación por razones de religión, raza o nacionalidad.
Cierto. No están los “identitarios” neofascistas solos en semejante refutación de los Principios, valores y demás cantinela de la Unión Europea recogidos en su flamante texto constitucional, que los socialeuropeos presentan como herramienta –si bien imperfecta- del futuro Estado Imperial SuperEuropeo según la doctrina de Jean Thiriart y Manolo Escobar.
No está solos en la identificación del Islam como enemigo irreconciliable de la Patria Europa en traducción simultánea y en retransmisión via satélite.
Con ellos están fuerzas poderosas de la política, la cultura, la economia, de los Estados nacionales y la sociedad civil eurolándica en su conjunto.
Se sienten seguros a la sombra de poderes fácticos “políticamente incorrectos” (sic) y bajo la presunta cobertura de un discurso retórico común que asegura impunidad jurídica y cobertura política. Eso piensan. Se equivocan

Sacacorchos 2 -

Decidieron hace ya muchos años no pensar. Ya lo hace la FAES por ellos.
Tácticos geniales esperan cosechar en Europa la siembra que nunca hicieron en España
No han acometido nunca nada en serio. Nada de verdad: hasta el final.
Aún hoy pretenden seguir nadando en la charca del Poder y guardar la ropa –incluyendo la chilaba y el chador- por si tienen de nuevo que gritar ¡Allah Akbar!, exaltando la alianza euroislámica contra el occidente americano y reivindicando la Revolución Pendiente... de un hilo: el del titiritero de turno que necesite monigotes “neonazis” y “antidemocráticos” para atemorizar a cuatro viejas y a cuatro progres. ¡Qué miedo!
Se justifican. Ergo, mienten. Mienten, niegan y renegian con la acrisolada desfachatez propia de tantos años de embustes, patrióticas patrañas y demás rollos macarenos. Veamos.
El problema es, según afirman falsamente, de tipo político-demografico: el Islam crece porque los inmigrantes afromorunos crecen.
Tautologia propia de la soleada inteligencia de la indigencia dirigente del neofascismo cañí, identitonto e indioeurofeo.
¿Dónde está el problema? ¿O son dos problemas en uno?

...... -

Para la Europa laica y cristiana, sionista y norteamericana, liberal y socialista, racista y democrática, antifascista y constitucional, capitalista y humanista, papista e iluminista. el Islam, como tradición y como inmigración, es una presencia espiritualmente incómoda, perfectamente sustituible como fuerza de trabajo por otra mano de obra más dócil, más “integrable”.
Los socialeuropeos, los patriotas identitarios, los guerreros étnicos, los eurosionistas de cruz céltica, los neofascistas reciclados, los hongos políticos lepenistas y los oportunistas de la derecha nacional-revolucionaria fueron, son y serán “alógenos” ideológicos, en su mayor parte, para el Partido único de la burguesía de masas europea.
No problem. Sobran los dos

Sacacorchos -

El patriotismo imaginario de los socialeuropeos no puede desarrollarse políticamente más que alienandose bajo la no menos imaginaria tutela de la Unión Europea, es decir a la sombra del Poder. Con él. Por él. Nunca sin él y mucho menos contra el.
Utilizando el discurso del Poder que aparentemente el Poder les ha robado, los socialeuropeos, los nacional-democrátas y los islamófobos de nuevo cuño pretenden medrar dentro del mismo sistema social y político que los ha despreciado siempre y utilizado a menudo en sus muy sucias guerras democráticas y en sus más sucias estrategias políticas negadas y renegadas tanto unas como otras impune y descaradamente..
Se suben a un carro triunfal que imaginan les llevará en medio de estandartes negros, antorchas llameantes, discursos ardororsos y eurodiputados a mogollón hacia el gobierno de la Nueva Europa identitaria y proletaria.
Se camuflan bajo la retórica opresiva que el Poder lanza contra las comunidades islámicas de Europa figurándose que así se les perdonará su pasado neonazi y antisemita.
Cobijándose bajo las alas de la infamia y el deshonor, mendigando la tolerancia de la burocracia política y policial, confiando en disfrutar las bagatelas que el Poder ofrece a veces a sus esbirros más pertinaces imaginan que la Unión Europea les dará el premio gordo de la lotería electoral de Bruselas.
Sin embargo, la cosa nos parece esta vez un poco cruda.

Abrelatas -

"Aunque la propaganda pueda vendar los ojos de nuestra generación jamás podra vendar los ojos de la historia".
Sí, pero dentro de cien años todos calvos, escuadrista "n-r". No me sirve, no me consuela que dentro de un siglo o dos se sepa que vivíamos bajo la férula del Gran Hermano orwelliano.
Sé que no lo dicen en ese sentido, pero hay que mantenerse vigilantes con pobres consuelos como aquellos religiosos "ese criminal ya lo pagará en el infierno". No, el criminal que lo pague en la tierra.
A nosotros nos corresponde atacar al Gran Hermano y a sus numerosos secuaces, cómplices y tontos útiles, empezando por descubrir las vergüenzas y el verdadero papel de las variantes extremas del sistema ("ultraderecha" patriótica e "infraizquierda" antifascista).

IRNA -

“Tenemos que poner en entredicho el nuevo estrangulamiento mundial y dictatorial unipolar de varios países belicistas que se quieren comer el mundo y nadie tiene derecho a —con su silencio o su connivencia—, apoyar la ocupación, el crimen y el belicismo del neocolonialismo ni contribuir a que éste prosiga; hoy más que en ningún otro período de la historia se están pisoteando los derechos humanos y humillando al ser humano”, ha declarado el presidente de Irán en un discurso pronunciado hoy lunes en la cumbre del Movimiento de los No Alineados (MNA) que se celebra en Teherán que versa sobre los derechos humanos y la diversidad cultural.


Mahmud Ahmadineyad ha añadido: “Hoy día algunas potencias buscan imponer su voluntad en el nombre de la mundialización y de la modernidad y procuran imponer su total hegemonía política en el planeta en el nombre del mercado libre, y tras imperar el capitalismo sobre las materias primas y los mercados mundiales con los lemas de la democracia, ocupar y expoliar.”

Tras destacar el importante papel que ha adquirido el MNA tras la caída de uno de los polos de poder del mundo, Ahmadineyad agregó: “Para ellos, el término países no adscritos o no alineados con las potencias arrogantes es, fundamentalmente, un fenómeno intolerable. Por tanto, bajo su punto de vista, tal como ellos ya han anunciado en multitud de ocasiones, los países, o están con ellos o contra ellos, y, todo el que no les sigue y no se alíe con ellos, lo presentan como un enemigo, aunque, gracias al despertar de los pueblos y a Dios la era de estas potencias está tocando a su fin y su satánica hegemonía está ya en declive.”

Después de sostener que los derechos humanos es un “concepto religioso”, mantuvo que hay, lamentablemente, una segunda imagen del mismo “adulterada en las últimas décadas” que “no es ni un concepto humano ni de justicia, sino una herramienta política y de ambiciones de poder que se utiliza en contra de la justicia”.


“He aquí —continuó— que en el nombre de los derechos humanos se tortura, se asesina y se fomenta la inseguridad. Nunca como ahora han estado tan en peligro ni se han denigrado tanto los derechos humanos. Mientras algunas potencias perpetran los mayores crímenes contra la humanidad, quieren imponer a los demás sus intereses y valores en el nombre de los derechos humanos. Y, mientras tanto, los mayores fabricantes y consumidores de bombas atómicas, químicas etcétera, se erigen como árbitros y controladores de las armas de destrucción masivas.”

Ahmadineyad prosiguió sin mencionar nombre de país alguno: “Mientras que es el agente de muchas guerras y golpes de estado y gestiona grandes torturas (como en Guantánamo, etcétera), va y habla de los derechos de los presos. Aunque ha perpetrado los mayores crímenes contra la mujer y la familia, va y suelta la proclama de los derechos de la mujer. Aunque se opone al voto dado por los pueblos de Irán, Palestina, Irán y Argelia, pretende hablar de la democracia.”

Dicho esto, el mandatario del país persa abogó para que hoy se haga una redefinición del concepto de derechos humanos que pueda sustituir a las dos de arriba mencionadas, que se hable de este derecho como de una “realidad basada en la espiritualidad, en la justicia y garantice el honor de las personas para toda la humanidad.”

“Sin lugar a dudas, un diálogo cabal y un intercambio de impresiones entre los respetables miembros del MNA podría ser un factor para acercar posturas y puntos de vista en pro de la realidad. La cumbre de ministros del MNA sobre los derechos humanos y la diversidad cultural es un paso importante para la definición de los índices necesarios para la creación de un sistema de derecho internacional fundamentado en la espiritualidad, la justicia, la equidad, los valores, el respeto hacia las culturas, los derechos de las naciones y la dignidad humana, por ser básicamente imprescindible así como deseable para la vida”, manifestó.




Braunau -

Cordura, esa pagina que has puesto no va... ya están los malos de la conspiración manipulando... je je je, no en serio, no se carga...

Organiza y convoca -

ASOCIACIÓN POR LA VERDAD SOBRE EL 11-S

Cordura -

Te invitamos a manifestarte con nosotros bajo el lema:

11-S: TERRORISMO DE ESTADO
iNVESTIGACIÓN, ¡YA!

MARCHA POR LA VERDAD (DESDE ATOCHA A MINISTERIO DE ASUNTOS EXTERIORES)

DOMINGO, 9 DE SEPTIEMBRE DE 2007
SALIDA: A LAS 12.00 HORAS EN ATOCHA, MADRID

Pueblo al Fusil -

Es un texto, el de Vinciguerra, buenísmo.
Lo había léido ya hace tiempo en RST; no viene mal releerlo, recordarlo y sentirse obligado a continuar la lucha contra judeomundialismo y sus objetivos mesianicos y destructivos.

Schwarze Block -

El pr´ximo finde semana hay manifa en Madrid sobre verdad 11-S.
Sería dabuten que todos los antagonistas, terceristas, nacional-revolucinarios y social-patriotas disponibles acudieramos funcionando como BloqueNegro al evento..¿Como lo veis?

Cordura -

Aquí podéis ver lo que le hicieron ayer mismo a un camarada (fue apaleado y secuestrado por la policía) que lucha desde hace años en vanguardia para esclarecer la VERDAD sobre el 11-S (es ciudadano norteamericano y español). No dejéis de leer su declaración.

http://investigar11 s.blogspot. com/2007/ 09/declaracion- de-greg-grisham- activista. html

escuadrista_nr -

Atacar el centro del poder economico y militar de un imperio historicamente genocida e invasor del mundo es terrorismo.

Abrasar con Napalm la ciudad de Faluya que con sus humildes medios resisten con gran dignidad la invasion del enemigo sionista, el enemigo de los pueblos arabes, islamicos, y de todos los pueblos del mundo es un acto legitimo de guerra.

Aunque la propaganda pueda vendar los ojos de nuestra generacion jamas podra vendar los ojos de la historia.

Alzados estan los pueblos y hombres libres de la tierra que defienden su identidad y lucharemos hasta las ultimas consecuencias, mejor las cadenas de acero que las cadenas invisibles que esclavizan conciencias.